La sonrisa de Natasha ...

Fue en Diciembre de 2011 cuando conocí a Natasha, un invierno atípico en Santander pues disfrutamos de unas temperaturas cálidas que propiciaban salir a fotografiar a todas horas

Me había llamado Fernando Baños, fotógrafo, para que le echara una mano con unas fotos que tenía que hacer y juntos pensamos el estilismo y la ubicación perfecta para realizar los disparos.

La sonrisa de Natasha está grabada en mi retina, sin duda sabia fresca, al igual que su mirada inquieta y achinada porque Natasha sonríe con el corazón. Colaboró abiertamente con todas nuestras indicaciones y siempre dispuesta a aprender, demostró tener esa lucha por conquistar una ilusión como cuando de pequeño te propones ser cualquiera de tus héroes de ficción.

Mela.- Cuéntanos Natasha . ¿cómo fue que se despertó tu curiosidad por el mundo de la moda? ¿Tuviste alguna influencia en concreto o fue un sentimiento que nació de ti?

Natasha.- Pues fue bastante curioso, estaba viendo la tele y apareció un documental sobre top models, y yo, que tenía 12 años me pregunté "si ellas pueden, por qué yo no?" Eso con respecto al tema de los modelos, en cambio si hablamos sobre moda refiriéndonos al vestir , fue simplemente porque cuando yo era pequeña no me gustaba ser como los demás, era un poco excéntrica.

Mela.- Por cierto, ¿cómo te gusta que te llamen? ¿Ya tienes nombre artístico?

Natasha.- La gente que me conoce me llama Nat o Nati, pero si alguien se inventa un nombre para mi no me molestaría.

Mela.- Tienes 16 años, una baby aún, estudias Primero de Bachillerato de Ciencias Sociales y me has compartido que te gustaría dedicarte a algo relacionado con la Economía ¿cómo encajas la moda en estos planes?

Natasha.- Pues mamá se encarga de recordarme cada día que tengo que seguir estudiando, porque esto se acaba algún día y yo todavía no he ni comenzado. Pero quiero acabar Bachillerato, porque me parece muy importante tener ese título, y encima soy buena estudiante.

Mela.- Y dime Natasha ... cuéntanos tu experiencia profesional con este mundo y si te asusta la idea tanto de llegar lejos como de quedarte a medio camino ¿qué es para ti, tener los pies en la tierra?

Natasha.- Tener los pies en la tierra es seguir siendo como eres, no olvidarte de lo tuyos, de aquellos que han estado siempre ahí, y no olvidar nunca de donde vienes. Pero me encantaría llegar a triunfar. Sé que es difícil, muy difícil, pero hay algo dentro de mí que me dice que voy a llegar lejos. Quizás puede que se me limite el trabajo por mis rasgos, pero por eso mismo creo que puedo llegar a ser única en la industria.
 
Mela.- Háblanos de un día normal en tu vida, tus rutinas y si te cuidas especialmente para mantenerte en forma. Seguro que tienes algún truquillo, algún secreto que podrás compartirnos generosamente para que no perdamos la esperanza las demás ... jejeje ...

Natasha.- Jajajaja pues desde pequeña siempre he considerado importante el hecho de llevar una alimentación sana, aunque a una pizza o un buen helado no me resisto. También beber mucha agua e infusiones. Te mentiría si te digo que duermo ocho horas.... Porque cuando tengo exámenes, muchas veces de 3 unidades, duermo 4 ó 5 horas , y al día siguiente llevo una cara de zombie que no es normal. Y por último, me hidrato muchísimo la piel, si no lo hago un día siento mi piel áspera.

Mela.- La moda es un mundo muy competitivo, cuéntanos tu percepción en lo que has conocido hasta la fecha. Tengo entendido que para subir a una pasarela en España, debes tener 18 años . ¿qué puertas se te cierran y qué otras alternativas se te presentan con esperanza? ¿Tienes algún proyecto futuro?

Natasha.- Pues sobre este mundo de momento he conocido poco, es difícil hacerse un hueco, pero no imposible. Cuando estuve en Barcelona fue genial ir con mi madre y  conocer a los de mi agencia, conocí a una modelo del Corte Inglés y a mi booker, que es la que ha depositado su confianza en mí y quiere que llegue a ser una buena modelo.

Y sobre la edad de las modelos para poder subir a una pasarela, creo que la madurez de una persona no se mide con la edad, ni tampoco la preparación de cada una a la hora de subirse y desfilar. Pero aún así hay mercado fuera de España y a mi me encantaría ir fuera. Lo que si que me parece bien es que hagan controles de peso a las modelos, ya que no es nada agradable ver esqueletos andando por la pasarela.

El único proyecto futuro que tengo es irme a Barcelona en verano, porque allí es donde está la verdadera industria, y si hablamos de  un futuro más lejano me encantaría vivir en París, que es mi ciudad favorita, y poder dedicarme al mundo de la moda, pero esta vez como diseñadora o sino como agente financiera en alguna ciudad grande.

Mela.- ¿Algún referente de modelo para ti . alguien que consideres un ejemplo a seguir?

Natasha.- Hay dos top models que a mí me encantan, una es Joan Smalls que me encanta porque es muy exótica y otra es  Natalia Vodianova, que era una chica pobre y ahora es una de las grandes conservando su humildad por encima de todo.
 
Mela.- Sobre tus gustos en moda ¿cómo te defines en cualquier situación? . ya sea en el día a día, en un acto importante o una fiesta. ¿Cómo marcarías tu estilo en cualquiera de los ambientes?

Natasha.- Pues demasiado casual diría yo, pero me encantan las tiendas vintage y me gustaría invertir en una prenda cool.

Mela.- Y ya para terminar Natalia . dinos tres cualidades que te atribuyes y tres defectos que te gustaría mejorar.

Natasha.- Tres cualidades...La cualidad más importante que tengo es que lucho por lo que quiero, cueste lo que me cueste, no hay nada mejor que llegar a conseguir lo que realmente te hace feliz. También dice la gente que doy buenos consejos, pero solo cuando me pongo seria, porque soy una cabecita loca jajaja. Y otra de las cosas buenas que tengo es que soy muy risueña, un arma de doble filo, ya que cuando estoy en clase suelo reirme por cualquier cosa, y los profes siempre me llaman la atención. Sobre mis peores defectos puedo decirte  que soy una desordenada, impaciente y bastante nerviosa.

Y por último agradecerte muchísimo a ti y a Fernando Baños por aquellos días que estuvimos haciendo la sesión de fotos (os debo una cena), me lo pasé genial con vosotros, mira tu por donde nos salió redonda la jugada. También a mi madre por todo su apoyo sé que siempre estará ahí, y a mi booker, que confió en mi desde un primer momento.